HUELVA, 16 DE ABRIL 2024.
Ayer, por la tarde, la alcaldesa Pilar Miranda, inauguró las obras de urbanización exterior de la “Fuente Vieja” (barrio de las Colonias).
¿Qué es la fuente vieja? -me podrías preguntar- Es el inicio del acueducto subterráneo que, en el siglo I d.C, construyeron los romanos, para conducir el agua potable en Huelva desde el Santuario de la Cinta hasta la Plaza de San Pedro, por debajo de los cabezos.
El agua, para los romanos, era el símbolo mismo de su existencia desde que Rómulo, el fundador de Roma, fue salvado de las aguas del Tíbet.
El elemento que les otorgaba poder y les abría el camino hacia las mayores obras de infraestructuras hidráulicas que perduran hasta hoy.
La fuente vieja, es un ejemplo y ha sido recuperada por los servicios arqueológicos del Ayuntamiento de Huelva.
Es el símbolo de la mejor ingeniería, de la vida que supone el agua y de la historia de nuestra ciudad.
SÓLO PODRÍA ESTAR EN LA CIUDAD MÁS ANTIGUA DE OCCIDENTE
La galería subterránea, del antiguo acueducto, quizá sea el elemento histórico más importante que hayamos sido capaces de conservar en la ciudad.
En las tareas de conservación y restauración, durante 20 años, han participado tres corporaciones diferentes.
Una realidad que reconoció, de forma elegante, la alcaldesa, Pilar Miranda.
Al destacar, en su discurso, el papel realizado por los dos alcaldes anteriores, presentes en el acto.
Es decir, el de quien os escribe este BD y el de su predecesor, Gabi (imagen), al afirmar:
“La ciudad no es patrimonio de nadie. A cada alcalde le corresponde, en su etapa, trabajar por su crecimiento y el bienestar de los onubenses”
Termino: El acueducto romano, del siglo I d.C, que originariamente podría salir del actual Santuario de la Cinta, hasta llegar al cabezo de San Pedro, se puede decir que es la “Aguas de Huelva” de hace 20 siglos. Al suministrar agua potable a la población. 
Algo único, que todavía sorprende a los mejores ingenieros, en pleno siglo XXI.
Y, a nosotros, nos llena de orgullo solo pensar lo que tenemos, bajo los cabezos.
Y nos confirma que, una obra de esta índole, sólo podría estar en Huelva.
La ciudad más antigua de occidente. ¡BUENOS DÍAS!.
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