“No le podría decir, imagino que en el despacho donde estoy alojado ahora”. Su falta de precisión generó desconcierto, especialmente al tratarse de un puesto de alta dirección.
HUELVA, 13 DE ENERO 2025.
El pasado jueves, David Sánchez Pérez-Castejón, hermano del presidente del Gobierno, compareció ante la jueza Beatriz Biedma, titular del Juzgado de Instrucción número 6 de Badajoz. La declaración se enmarca en la investigación de presuntos delitos relacionados con su desempeño como jefe de la Oficina de Artes Escénicas de la Diputación de Badajoz, un puesto al que accedió en 2017.
Uno de los momentos más destacados de la declaración fue cuando Sánchez, conocido artísticamente como David Azagra, admitió desconocer la ubicación exacta de la oficina que dirige. A preguntas de la magistrada, respondió: “No le podría decir, imagino que en el despacho donde estoy alojado ahora”. Su falta de precisión generó desconcierto, especialmente al tratarse de un puesto de alta dirección.
La jueza insistió en varias ocasiones para que el investigado definiera su rol y explicara las funciones de la oficina. Sánchez afirmó que su labor estaba ligada al proyecto Ópera Joven, que calificó como “pionero” en los conservatorios de la provincia. Sin embargo, reconoció que dicho proyecto ha realizado solo tres producciones musicales en los últimos siete años. También señaló que las oportunidades para dirigir la orquesta, una de sus supuestas responsabilidades, han sido escasas.
Sánchez atribuyó su contratación a un proceso estándar de selección pública, alegando que descubrió la existencia del puesto "a través de Google" mientras buscaba empleo. Su abogado destacó que no tenía conexiones previas con la Diputación ni con figuras del PSOE extremeño, pese a que su hermano lideraba ya el partido en el ámbito nacional.
En cuanto a las condiciones laborales, Sánchez declaró que su despacho ha sido itinerante y que en varias ocasiones ha tenido que buscar espacios alternativos en el edificio de la Diputación. Según él, sus tareas incluyen actividades de representación institucional, lo que justificaría una presencia física irregular en su puesto de trabajo.
Durante la comparecencia, David Sánchez mostró nerviosismo y dificultades para responder a preguntas concretas, especialmente cuando se le interrogó sobre detalles operativos de su día a día. En un momento de la declaración, explicó que vive en el municipio portugués de Elvas desde finales de 2021 y que acude a su puesto presencialmente "cuando es necesario".
La investigación sigue abierta, y la jueza Biedma analizará las respuestas del investigado y las pruebas aportadas para determinar si existen indicios suficientes para proceder a juicio. El caso ha suscitado un intenso debate político y mediático, al tratarse de un familiar directo del presidente del Gobierno.
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