HUELVA, 1 DE OCTUBRE 2024.
Ayer, mi nieta, Manuela, subió a casa, a las diez de la noche, a hacerme una entrevista urgente para el colegio, con motivo del Día de los Mayores.
Te confieso que no tenía ni idea de que el uno de octubre se celebrara este Día.
Carmen preparó el movil, a toda prisa y nos grabó la entrevista. Manuela se sentó frente a mí y me hizo tres preguntas:
P: Si echas la vista atrás, ¿qué momentos de tu vida y qué lugar te trae mejores momentos, sensaciones y recuerdos?.
R: “El día de mi boda, el de los nacimientos de mis hijos y mis nietos y cuando Huelva quiso que fuera su alcalde”.
P: ¿Recuerdas alguna canción especial de otra época de tu vida?
R: “Si. ¡Oh Sole Mío!, de Elvis Presley”
P: ¿Recuerdas alguna comida con especial cariño?.
R” “Las de Navidad, fin de año. Y la de mi 80 cumpleaños, que me regalasteis toda la familia, incluida tú…”
Me refiero a la entrevista para resaltar la fortuna que tiene mi nieta de poder entrevistar a su abuelo, cuando mis hijos casi ni conocieron al suyo, mi padre, Adolfo Rodri.
Hoy, España, la esperanza de vida es superior a los 85 años y no es raro llegar a los 90 y 95 años, en plena facultades mentales.
En la familia hemos tenido el caso excepcional de la Tía Lela, quien murió a los 107 años, pero estuvo muy lúcida hasta el final.
Tanto era que, el día de sus 106 cumpleaños, una reportera de TV le preguntó: “Señora, cuál es, ahora mismo, su principal deseo?. Y le contestó: “¡Qué me salga un novio!”. Ella, sabía que pedía la luna.
Al verano siguiente, con 107 años, la Tia Lela se nos fue, sin molestar a nadie, a las “Marismas del Cielo”, en una noche de luna llena.
SER MAYOR NO ES LA JUVENTUD PERDIDA
Hoy, es el Día de los Mayores. Ser mayor no es la juventud perdida, sino una nueva etapa de oportunidades en la vida.
Envejecer es un proceso donde nos podemos convertir en la persona que, quizás, debíamos haber sido siempre.
En España, cada día nacen menos niño. En cambio, aumenta el número de personas con 65 y más años y ya está cerca de los 10 millones, lo cual supone un 20 % de la población.
Hoy, es el Día Internacional de los Mayores. Y ser mayor no es una enfermedad, ni sinónimo de inútil, ni todos los mayores son iguales.
Hay quienes desde el punto de vista fisiológico están muy bien. Y otros que su cuerpo es una “casa con goteras”, pero éstas se reparan (médicos y medicinas) sin necesidad de derribar la casa.
Hay mayores con la mente abierta, conectados a su familia y amigos, que mantienen la curiosidad por todo y siguen ocupados cada día.
Son los abuelos que le cuentan historias a sus nietos, los llevan al colegio y a jugar al fútbol, mientras los padres trabajan.
Mientras hay mayores mermados físicamente, que se sienten discriminados por la edad. Son los se confunden con las teclas del móvil.
Hoy es el día de los que le siguen diciendo a sus hijos (de 50 años): ¡Abrígate, hijo/a que hoy hace mucho frío!.
Si me lo permitís, termino con unos consejos para los jovenes que tienen la fortuna de contar con sus padres junto a ellos:
“Tratarlos con cariño y mimarlo, porque muchas veces lo necesitan”. “No le deis ordenes con brusquedad, como a vosotros no os gustaba que ellos os la dieran, cuando erais adolescentes”.
Perdirles consejos. Estar alegres delante de ellos. Contarle vuestros éxitos y fracasos, como a un amigo. Para gozar o sufrir juntos.
Cuando no os entiendan porque no oye bien, cuando caminen despacio, ayúdalo y no os pongáis nerviosos.
No olvidéis que, aunque parezca lejano, el tiempo pasa volando, y sin daros cuenta estaréis en la misma situación de vuestros padres.
Los que, hoy, 1 de octubre, celebran el Día Internacional de los Mayores. ¡BUENOS DÍAS!
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